Introducción:
Rio sinú |
Los sinúes o zenúes son un pueblo amerindio cuyo territorio
ancestral está constituido por los valles del río Sinú y el San Jorge y el
litoral Caribe en los alrededores del Golfo de Morrosquillo, en los actuales
departamentos colombianos de Córdoba y Sucre.
Historia:
El poblamiento del litoral Caribe colombiano se inició hace
más de 4.000 años. Hace 6.000 años los habitantes de la región, moldearon la
que hasta ahora es una de las más antiguas cerámicas conocidas en América y
combinaban la explotación de la pesca y la caza con la agricultura intensiva de
tubérculos.
Por ser zona con abundancia de agua, desde aproximadamente
el 200 a. C. en adelante, los sinúes formaron una especie de sociedad
hidráulica que construyó un sofisticado sistema de canales de drenaje, que les
permitía controlar las inundaciones y adecuar extensas zonas para las viviendas
y especialmente para los cultivos. El sistema, que fue expandiéndose
progresivamente, llegó a cubrir hasta 500.000 hectáreas de suelo cenagoso sobre
el año 1000.
Olla de cerámica sinú con base anular y figuras sentadas. |
La orfebrería y la alfarería registraron un notable
desarrollo, siendo muy reconocidos sus adornos de oro fundido y batido. La
filigrana la conseguían mediante cera perdida. Esta civilización perduró hasta
el siglo XVI.
En la época de la conquista española, los sinúes o zenúes,
habitaban las sabanas no inundables y tenían relaciones comerciales con sus
vecinos de la serranía de San Jacinto y de las riberas del río Magdalena. En el
siglo XVI se destacaba el gran centro religioso de Finzenú, en el valle del
Sinú, que estaba bajo la dirección de una mujer que ejercía su dominio sobre
varias poblaciones aledañas. El Panzenú era la denominación del valle de San
Jorge; y Zenufana el valle del Nechí y el bajo Cauca, zona de producción de
oro.
Con la Conquista y la Colonización española, se inició un
proceso sistemático y violento de despojo de las tierras a las comunidades
indígenas sinúes. En el siglo XV, al contacto con los hispanos y otras
poblaciones no indígenas se produjeron cambios considerables en la cultura
Sinú, como la pérdida de capacidad organizativa tradicional que fueron
desestructuradas al implementar instituciones como la de encomienda y
culturalización. Surge así en este siglo, la encomienda, dando origen a la
formación de haciendas, mercedes de tierras y adjudicaciones a labriegos
españoles, mestizos, negros, zambos y mulatos.
Cultura sinú: Madre e hijo en terracota. |
Los sinúes hablaban la lengua Guajiba o Guamacó, que
desapareció rápidamente durante la conquista. A finales del siglo XVIII sólo se
hablaba en los pueblos de Cereté y San Cipriano o en el alto San Jorge, pero
tras la prohibición de las lenguas indígenas en 1770 por el rey de España
desapareció completamente sobreviviendo sólo algunos toponímicos y nombres de
la flora y fauna así como algunos vocablos del dialecto coloquial costeño
sabanero o costeñol, como "pechiche", entre otras.
En las cercanías de los pueblos de San Jacinto y de San Juan
Nepomuceno se encuentran los Petroglifos de San Jacinto, importantes restos
arqueológicos de la cultura sinú.
Resguardo:
Definición: (El Resguardo es una institución legal sociopolítica de origen
colonial español en América, conformada por un territorio reconocido de una
comunidad de ascendencia amerindia, con título de propiedad inalienable,
colectiva o comunitaria, regido por un estatuto especial autónomo, con pautas y
tradiciones culturales propias. Esta institución fue mantenida por algunas
repúblicas independizadas del Imperio Español y es reconocida plenamente en
Colombia.)
Durante el siglo XVIII, los españoles reconocieron tres
Resguardos Indígenas en el Distrito de Tolú: en San Nicolás de Bari (Lorica) ,
San Sebastián de Urabá y San Andrés de Sotavento (Mexión), con sus anexos Chinú
y Pinchorroy (Chimá) y cabildo menor urbanu (sahagun).
Pertenece a la etnia zenú y aún practica los rituales ofrecidos a sus deidades. |
En 1773, el rey de España reconoció el territorio de San
Andrés de Sotavento como resguardo indígena, después de un largo proceso de
delimitación. Este resguardo de 83 mil hectáreas subsistió hasta comienzos del
siglo XX cuando fue disuelto mediante la ley 55 de 1905, dictada por la
Asamblea Nacional Constituyente.
Los indígenas lucharon, especialmente desde 1969 por
recuperar su resguardo. En 1990 el estado reconstituyó el Resguardo de San
Andrés de Sotavento con 10.000 hectáreas y progresivamente lo amplió hasta
alcanzar 23.000 hectáreas para una población estimada en 33.000 habitantes.
Durante el proceso de lucha por la tierra decenas de líderes de los sinúes
fueron asesinados.
Otrás comunidades sinúes en Sucre y Córdoba han logrado
reorganizarse y en la actualidad funcionan cabildos y organizaciones regionales
de autoridades indígenas, que los rigen, representan y reivindican la
recuperación de los resguardos. El fenómeno organizativo y de reidentificación
cultural se reflejó en el censo de población de 2005. Actualmente en su
liderazgo existe la presencia del cacique mayor municipal, líder comunitario
encargado de solucionar no solo los problemas que se presentan entre los
habitantes de la población, sino también para los arreglos matrimoniales,
realizados por la iglesia católica, hurtos que pueden ser pagados con dinero u
otras sanciones.
Economía:
Sus principales actividades son la agricultura y la
artesanía. Cultivan maíz, ají, yuca, fríjoles, ahuyama, ñames, frutales como
patilla, melón, mango, corozo, guayaba y guanábana y usan diversas palmas,
gramíneas y bejucos para artesanías y construcción de viviendas.
Una actividad adicional es la pesca. Durante la Semana
Santa, además de pescado, comen como plato especial la "babilla"
(Caiman crocodylus fuscus) y la tortuga "hicotea" (Trachemys scripta
callirostris), que a veces crían en pequeña escala. Secundariamente cazan
ñeques y aves como el cormorán o "pato cuervo" (Phalacrocorax
olivaceus) y diferentes pavas.
Como artesanos se destacan en el trenzado en fibras
vegetales para fabricar sombreros y otros objetos, que actualmente son
exportados a varios países. El sombrero vueltiao se fabrica a partir de la
fibra extraída de la "caña flecha" (Gynerium sagitatum). La fibra de
"napa" (Manicaria saccifera) se usa para elaborar canastas, floreros,
escobas,
No hay comentarios:
Publicar un comentario